Ventajas de Formalizar tu Empresa en el Perú

Ventajas de Formalizar tu Empresa en el Perú
En el Perú, una gran parte de la actividad económica aún se desarrolla en la informalidad. Según cifras de la Cámara de Comercio de Lima (CCL) publicadas en Perú21, de los más de 9 millones de negocios que existen en el país, 7.3 millones siguen operando al margen del sistema legal y tributario.

Este fenómeno, aunque común, representa una barrera para el crecimiento sostenido de miles de emprendedores que, al no formalizarse, se limitan en acceso a oportunidades financieras, comerciales y legales.

¿Qué se considera una MYPE formal?

Tal como explicamos en nuestro artículo sobre los regímenes tributarios en el Perú, una MYPE (micro o pequeña empresa) es aquella persona natural o jurídica cuyos ingresos anuales no superan las 1700 UIT (Unidades Impositivas Tributarias). Si tu negocio ha demostrado estabilidad y potencial, dar el paso hacia la formalización no solo es legalmente recomendable, sino estratégicamente necesario.

Si no sabes cómo iniciar este proceso, existen empresas de outsourcing contable y estudios especializados que brindan asesoría integral para formalizar y mantener tu negocio dentro del marco legal.

Beneficios de formalizar tu empresa

A continuación, te detallamos las principales ventajas que obtendrás al convertirte en una empresa formal en el Perú:

Acceso al sistema financiero

Uno de los principales obstáculos para las empresas informales es la falta de acceso a financiamiento. Las entidades bancarias y financieras suelen ofrecer créditos con tasas preferenciales a las empresas formalmente constituidas, ya que estas presentan menor riesgo crediticio.

Estos créditos pueden ayudarte a:
  • Adquirir maquinaria o tecnología.
  • Abrir nuevos locales o expandirte a otras regiones.
  • Exportar tus productos o servicios.
  • Financiar capital de trabajo.

Además, contar con historial crediticio empresarial facilita futuras gestiones ante el sistema financiero.

Mejor posicionamiento en el mercado

Ser una empresa formal te permite emitir comprobantes de pago (boletas, facturas, recibos por honorarios, etc.), lo cual genera confianza en tus clientes, proveedores e incluso posibles inversionistas.

Muchas empresas grandes o entidades del Estado solo contratan con proveedores formalizados. Por ello, al legalizar tu negocio, amplías tu mercado potencial y te posicionas como un proveedor serio y confiable.

Acceso al crédito fiscal

El crédito fiscal es un beneficio tributario al que acceden únicamente las empresas formales con RUC y razón social activa. Este permite deducir del IGV a pagar el IGV que pagas en tus compras relacionadas al giro de tu negocio.

Por ejemplo, si compras insumos o materia prima para producir un bien, el IGV pagado puede deducirse del IGV que cobras en tus ventas. Esta dinámica reduce tu carga tributaria mensual, permitiéndote reinvertir con mayor eficiencia.

Participación en programas estatales

El Estado peruano, a través de instituciones como Produce, Sunat, PromPerú o Cofide, ofrece diversos programas de apoyo y capacitación para emprendedores formales:
  • Capital Semilla para startups.
  • Acceso a ferias y ruedas de negocio.
  • Asesoría para exportar.
  • Fondos concursables para innovación o transformación digital.

Solo las empresas legalmente inscritas pueden acceder a estos beneficios.

Contribución al desarrollo del país

Formalizar tu negocio no solo te beneficia a ti, también genera impacto social. Al cumplir con tus obligaciones tributarias, contribuyes al financiamiento de obras públicas, educación, salud, infraestructura y programas sociales. Tu aporte permite que el Estado invierta en el desarrollo de zonas vulnerables y en la modernización del país.

¿Cómo formalizar tu empresa?

El proceso varía dependiendo del tipo de persona (natural o jurídica) y del régimen tributario que elijas. En general, debes:
  • Elegir tu tipo de empresa como: EIRL, SAC, SRL, etc. (también puedes infórmate sobre las ventajas y desventajas de una SAC Eirl)
  • Redactar tu minuta o estatuto.
  • Inscribir tu empresa en SUNARP.
  • Obtener tu RUC en SUNAT.
  • Elegir tu régimen tributario (NRUS, RER, Régimen MYPE Tributario, Régimen General).
  • Solicitar autorización para emitir comprobantes electrónicos.